Cada semana intentamos que en los contenidos de nuestras cajas variadas haya verduras para hervir, hortalizas para ensalada y diferentes tipos de frutas. A lo largo del año cultivamos más de 140 frutas y verduras distintas, con el objetivo de ofrecer una alimentación variada y saludable. La huerta de Disfruta & Verdura es ecológica certificada y la gran mayoría de nuestros agricultores amigos también lo son. Aun así, los productos que contienen nuestras cajas no son siempre ecológicos, cuando los productos ecológicos no cumplen nuestros estándares de calidad (bien porque el punto de maduración no es el adecuado, o el sabor no es bueno…) los sustituimos por otros de agricultura convencional.
Las cajas de fruta y verdura recién cosechada se preparan a diario en el almacén ubicado en nuestra huerta de Tarragona y desde allí se envían directamente a domicilio.Nuestra huerta es muy extensa pero lógicamente no produce de todo. Por eso contamos con una red de agricultores amigos de todo el país que nos ayudan a tener una oferta rica y variada. La fruta y verdura que servimos se produce exclusivamente en España. Trabajamos en especial con productores de Andalucía, Aragón, Asturias, Castilla La Mancha, Canarias, Castilla y León, Cataluña, Extremadura, Murcia y Valencia. Gracias a ellos podemos decir que ofrecemos lo mejor de cada huerta.
A continuación podéis ver el listado de productos que utilizamos cada semana y saber qué tipo de agricultura se ha empleado para producirlos así como su procedencia. Todos nuestros productos están cosechados en España, excepto las naranjas que en verano son de contrastación.
Información legal alérgenos: Puede contener trazos de apio, frutos secos, huevo y leche.
Acelga: Esta semana hemos vuelto a cosechar acelgas de colores en nuestra huerta ecológica. Esta variedad tiene las pencas amarillas, rojas y verdes, y las acelgas suelen ser un poco más pequeñas que las de penca blanca. En el campo los almendros han florecido y el espectáculo de la naturaleza es una maravilla. En estos días parece como si la primavera pugnara por llegar antes de tiempo, ahuyentando el invierno. El termómetro alcanza temperaturas insólitas para esta época del año, pero para trabajar en el campo este clima suave es ideal.
Ajo: Un popular libro publicado hace décadas se titulaba el ajo, el limón y la cebolla curan más 1000 enfermedades. La afirmación puede ser discutible pero lo cierto es que las propiedades curativas del ajo, conocidas desde la antigüedad, han sido comprobadas por la ciencia moderna, desde prevenir enfermedades a reducir el colesterol y la presión sanguínea. Como ha venido sucediendo en las últimas semanas continuamos recibiendo los ajos de agricultura tradicional que nos envía nuestro productor amigo de Gerona. Para pelar los ajos de forma fácil y rápida, a la manera de un chef, coge un cuchillo de hoja ancha, coloca el diente de ajo debajo de la hoja y da un golpe seco con la mano, pero sin aplicar demasiada fuerza. Esto hará que el ajo se machaque ligeramente y que la piel se pueda desprender con un simple toque, sin mayores esfuerzos. De esta forma se hacen también los ajos “en camisa”, es decir los ajos que se echan sin pelar en los guisos. El golpe hace que la piel se abra y el ajo suelte su sabor. Para quitarte el olor que queda en las manos después de pelar ajos bastará con frotártelas con unas gotas de zumo de limón.
Ajos tiernos: También llamados ajetes, los cosechamos en nuestra huerta ecológica. Se trata de los ajos que se recolectan antes de madurar, de modo que aportan un sabor más suave y delicado a las recetas en las que se utilizan como ingrediente. Pueden consumirse durante todo el año, pero a finales del invierno, es cuando los ajos tiernos empiezan a encontrar su mejor momento para el consumo.
Alcachofa: Las alcachofas ecológicas cosechadas por nuestros vecinos, especializados en cultivos orgánicos son exquisitas y muy saludables. Esta flor –porque como sabéis, la alcachofa es la flor de la alcachofera- tiene propiedades extraordinarias que benefician nuestro organismo. Ayudan a desintoxicarlo, protegiendo el hígado de los radicales libres gracias a los ácidos fenólicos y estimulando la regeneración de las células hepáticas dañadas por las sustancias tóxicas. Puedes hacer las alcachofas hervidas, al microondas, al horno o al vapor; se cocina en poco tiempo y siempre quedan exquisitas.
Berenjena: Una de las recetas tradicionales más antiguas de la cocina andaluza son las berenjenas a la cordobesa: cortadas en bastones, fritas y servidas con miel de caña. Un sabor tradicional, delicado y delicioso. Pruébalas con las berenjenas de agricultura tradicional de esta semana que nos llegan precisamente de la huerta andaluza, de Málaga. El truco para que te queden bien estas berenjenas es cortarlas, sumergirlas durante 20 minutos en agua con sal y luego escurrirlas bien para enharinarlas y freírlas.
Brócoli: Brócoli ecológico cosechado en nuestra huerta. Esta hortaliza pertenece a la familia de las coles y su éxito en la cocina se basa en dos hechos incontestables, su excelente sabor y su beneficios para el organismo. En efecto, el brócoli ofrece un alto contenido en vitamina C, carotenos, vitamina A, selenio, potasio, calcio vegetal, fibra, vitaminas del complejo B y proteínas vegetales. Para hacer un pasta con brócoli rápida y sabrosa, hierve durante 5 minutos un brócoli partido en flores y luego saltéalo en una sartén grande con un ajo y una guindilla y al final, añade 4 o 5 filetes de anchoas troceados y apaga el fuego. Reserva ½ vaso del agua de cocción de la pasta, escúrrela y échala en la sartén añadiendo el agua y mezclando bien.
Calabacín: Nos lo envía un vecino de nuestra huerta y es de agricultura tradicional. Si quieres hacer una tortilla con una textura diferente y sacarle todo el partido al sabor del calabacín, en lugar de cortarlo, rállalo. Luego lo salteas y haces la tortilla como siempre. Fácil, rápido y buenísimo.
Calabaza: Calabaza ecológica producida por un agricultor vecino de nuestra huerta. La calabaza tradicional tiene una pulpa con un bonito color naranja y un sabor suave y dulce, que suele gustar a los niños. Si quieres que las legumbres y otras verduras les resulten más suaves y sabrosas para los niños, las puedes combinar con calabaza. Es un buen recurso para dar más verdura a los pequeños y acostumbrarlos a una alimentación variada.
Calsots: Los presentamos en manojos de 10, 15 y 25 unidades. Además de los que recibas en tu caja habitual, cuando quieras puedes pedir una caja especial de calsots. Es un producto típico del invierno, cultivado en nuestra huerta ecológica. El calsot es una variedad de cebolla tardía que toma su nombre de la práctica de amontonar tierra encima de los brotes nacidos de la cebolla (se “calzan” con tierra) para conseguir tallos blancos de unos 20 cm de longitud. Se pueden hacer de diferentes maneras, en tortilla o asados al horno o a la brasa, servidos con salsa romesco, el sabroso condimento a base de tomate, frutos secos, ajo, ñora, aceite y vinagre.
Cardo: Para quienes lo pedían, hemos vuelto a cosechar cardo ecológico en nuestra huerta. El cardo está ganando adeptos como producto curioso en la cocina. El cardo se puede hacer de muchas maneras diferentes. Por ejemplo con almejas: limpia el cardo, retírale los hilos, trocéalo y cuécelo en un cazo con agua hirviendo, sal y unas ramas de perejil durante 20 minutos. Pica finamente dos ajos y dóralos en una sartén con un chorro de aceite de oliva. Incorpora unas lonchas de jamón finamente picado y rehoga el conjunto. Añade las almejas y una cucharada de harina y mezcla bien. Incorpora el cardo con un poco del caldo de cocción. Vierte un chorro de vino blanco y deja que se cocine durante unos minutos. Agrega un vaso de caldo de verduras y perejil picado al gusto. Remueve, deja un minuto y sirve.
Cebolla Morada: Cebolla de agricultura tradicional de la huerta aragonesa. Aunque la cebolla ha sido tradicionalmente un alimento para simbolizar la pobreza, como nos recuerdan el dicho “contigo pan y cebolla” o Miguel Hernández en su poema Nanas de la cebolla: “ La cebolla es escarcha, cerrada y pobre…”, se trata de un alimento muy rico en vitaminas y oligoelementos a los que se añaden, en el caso de la cebolla morada, las antocianinas, unos antioxidantes muy activos. Es decir que además de ser un ingrediente básico de nuestra cocina, la cebolla nos aporta sus virtudes medicinales.
Cebolla Tierna: Los manojos de cebolleta de esta semana son de nuestra huerta ecológica. Los cosechaos cuando el bulbo aún está tierno, en fase de desarrollo. Su sabor es más suave y menos picante que el de la cebolla seca. Si haces la clásica sopa de cebolla con cebollas tiernas te quedará más suave. Corta las cebolletas en rodajas finas, saltéala en mantequilla a fuego suave durante unos 7 minutos, añade ½ vaso de vino blanco seco, deja que reduzca, añade caldo (de pollo), una hoja de laurel, un poco de tomillo y sal y deja cocer media hora a fuego bajo. Al apagar muele pimienta negra y sirve la sopa sobre rodajas de pan seco y echa queso gruyere rallado por encima para que funda con el calor del caldo.
Col Lombarda: Cosechada en nuestra huera ecológica, la lombarda tiene un atractivo color morado que luce en cualquier receta. Prueba esta crema fácil y rápida: corta en juliana la lombarda, una cebolla y una patata a dados; sofríe todo unos minutos, cubre con agua o caldo de verduras y deja que hierva 15 – 20 minutos a fuego medio. Añade un ajo laminado al final y tritura para hacer un crema de textura fina.
Col Picuda: Se reconoce por su forma característica acabada en “pico”. La cultivamos en nuestra huerta ecológica para cosecharla a lo largo del invierno que es cuando está en su mejor momento. Tiene un sabor más delicado que la col habitual y se puede hacer en ensaladas. Por ejemplo, cortada en juliana y aliñada con aceite, vinagre (poco), sal, pimentón, comino y ralladura de piel de naranja. Una receta antigua y sabrosa.
Coliflor: También la coliflor es ecológica y de nuestra cosecha. La verdad es que este año están saliendo buenísimas, tiernas y de sabor delicado.
Coliflor Romanescu: Es “prima” de la coliflor, tiene un bonito color verde lima y unas atractivas flores en forma de arbolito o de pagoda. La cosechamos en nuestra huerta ecológica. Su nombre“Romanesco” es de origen italiano, ya que esta variedad se comenzó a cultivar en ese país. Se hierve igual que la coliflor y su sabor es más suave y dulce.
Escarola: La escarola es la reina de las ensaladas de invierno. Su sabor dulce con matices amargos, combina muy bien con cítricos, frutos secos, apio y cebolla y con vinagretas que incorporen ajo o ajetes. Esta semana tenemos escarolas rizadas de agricultura tradicional, que se blanquean atando las hojas exteriores con esparto de manera que, al no haber función clorofílica, las hojas interiores quedan blancas, tiernas y más dulces.
Espinacas Baby: Pequeñas, delicadas y exquisitas, estas espinacas son nuestras favoritas. Se trata de las espinacas de hoja lisa cosechada en forma temprana, de agricultura tradicional, para aprovechar toda su ternura. Son ideales en ensalada, hervidas o salteadas. No hace falta quitarles el tallo, son igual de tiernos que las hojas. Si las vas hervir o saltear, la cocción debe ser corta, un par o tres minutos es suficiente.
Hierbas aromáticas: En el huerto ecológico reservamos un rincón para las plantas aromáticas que dan sabor a nuestra cocina mediterránea. Plantamos perejil, romero, cilantro, tomillo, salvia, orégano, menta, etc.
Hinojo: Desde hace varios años que sembramos hinojo en la huerta ecológica. El hinojo tiene un sabor suave y dulce, ligeramente anisado con textura crujiente. Para limpiar el bulbo, tienes que quitar las hojas exteriores más duras, que puedes reservar para el caldo, mientras que el tallo, en especial las pequeñas hojas verdes, se suelen utilizar para aromatizar pescado al horno. Una idea para ensalada: corta el hinojo en rodajas finas y naranja en dados (quitando todo lo blanco), añade aceitunas negras y alcaparras y aliña con aceite de oliva virgen y sal.
Kalets: Un agricultor vecino de nuestra huerta produce esta nueva y deliciosa verdura de agricultura tradicional. Las kalets son fruto del cruce realizado con métodos naturales entre la col Kale y las coles de Bruselas. Reúne los mejores beneficios y sabores de cada uno. Son de tamaño pequeño, caben en la palma de la mano, y tienen las hojas características de la Kale y el tallo típico de las coles de Bruselas. En su sabor suave y dulce que recuerda a las nueces se combinan los gustos de ambas verduras. Si las haces hervidas o al vapor disfrutarás al máximo de su sabor.
Lechuga Maravilla: Ecológica y de nuestra huerta. Esta variedad tiene hojas gruesas que forman un cogollo denso, de color verde que se va volviendo más intenso según llega a los extremos donde finalmente adquiere una tonalidad rojiza. La textura es crujiente, el agua se percibe mucho más que en otras lechugas, es muy jugosa, dulce y con un toque ligeramente astringente.
Ñoras: Pimientos secos de forma redondeada, que deben su nombre al pueblo murciano de La Ñora, dedicado a la producción de ese ingrediente imprescindible de nuestra cocina. La ñora no es picante y su pulpa es carnosa. Primero, debemos quitarle las semillas. Luego, las hidrataremos durante unas horas para sacarles la pulpa raspando con un cuchillo, que es lo que se aprovecha en la cocina. Normalmente la carne de ñora se añade a los sofritos al final.
Patata Agria: Todas las variedades de patatas son más o menos aptas para todas las cocciones, sin embargo algunas tienen características que las hacen más adecuadas para un tipo de preparación determinada. La patata agria de estas semanas nos llega de Segovia y es de agricultura tradicional. Es la variedad ideal para hacer patatas fritas ya que resiste muy bien la altas temperaturas del aceite y absorbe menos grasa que otras variedades. Según los especialistas para freír se debe recurrir a la técnica de la doble fritura. Primero se fríen con el aceite a temperatura más baja durante unos 5 minutos, se dejan enfriar y luego, en el momento de servir se las vuelve a pasar dos minutos por el aceite, está vez a temperatura más alta, para que queden crujientes por fuera y cremosas por dentro. Si quieres conseguir patatas fritas sin freírlas prueba con el horno: corta las patatas en bastones como para freír, las sumerges 10 minutos en agua para que suelten el almidón, las retiras y secas bien con un paño, luego las pones en la bandeja del horno untadas con aceite de oliva; asas durante 25 minutos al horno precalentado a 200º y cuando estén tiernas subes la temperatura a 250º durante 5 minutos más hasta que están doradas y crujientes.
Patata Monalisa: Apta para todo tipo de cocciones, la Monalisa de esta semana nos llega también de la huerta segoviana y es de agricultura tradicional. Te sugerimos preparar unas patatas empanadas: prepara una mezcla de pan rallado con romero triturado. Corta las patatas en dados mas bien grandes, hiérvelos durante 10minutos y escúrrelos. Empana los dados de patata con la mezcla de pan rallado y romero y sofríe hasta que estén bien dorados.
Tomate de colgar: Esta variedad de tomates crece en racimos que una vez cosechados se cuelgan en sitios frescos y bien aireados para conservarlos durante más tiempo. Son de agricultura tradicional tienen forma redondeada, piel fina y color rojo anaranjado. Son exquisitos para restregar sobre el pan y hacer pan con tomate y aceite, y también están muy bien para poner en las ensaladas.
Tomate Ensalada: Los tomates de esta variedad especial para ensaladas son ecológicos y nos los envía José, un agricultor amigo de la huerta almeriense. Tienen una textura crujiente y un sabor intenso. Pueden presentar una piel con tonalidades verdes pero esta coloración no significa falta de madurez, es una característica de este tipo de tomates, que están en su punto, listos para consumir y disfrutar.
Tomate Maduro Pera: Tomate ecológico especial para salsas y sofritos aunque también vale para ensaladas. Se cosecha cuando llega su punto óptimo de maduración. Para hacer una salsa rápida, los puedes rallar y sofreír con un diente de ajo y una hoja de laurel o de albahaca durante 5 minutos.
Tomate Maduro Rama: El clásico tomate maduro ecológico, tal como se coge de la mata, con sus ramas y su intenso colorido rojo. Perfecto para sofritos y salsas.
Tomate RAF: El RAF es la estrella de los tomates de invierno. Su sabor intenso es inconfundible. De agricultura tradicional, es una variedad relativamente joven, que nació en la Vega de Almería en los años ‘70. Allí, el invierno es duro, las aguas salinas y la tierra poco generosa. Los campesinos cruzaron distintas variedades buscando un tomate para cultivar al aire libre, capaz de resistir las inclemencias de la zona. Así descubrieron un tomate que combate la salinidad del agua generando más azúcares, resiste a los ataques de los hongos y, al permanecer más tiempo en la mata porque el frío ralentiza su crecimiento, concentra más sabor.
Verduras para el caldo: Los ingredientes para el tradicional caldo casero preparado con verduras de agricultura tradicional: apio, chirivía, nabo, zanahoria y col. Puedes añadir una patata, una cebolla, un trozo de calabaza y, si quieres un caldo más consistente, la carne que te apetezca, ternera, pollo, cerdo… Un vez colado el caldo reserva la carne y las verduras. Cuando se enfríen pica todo y haz una “ropa vieja”: sofríe una cebolla y un pimiento verde, añade la carne y verdura picada y deja unos minutos removiendo con una cuchara de madera para que los sabores se mezclen.
Zanahorias: Las zanahorias al horno son ligeras, sabrosas y muy fáciles de hacer. Lava y pela las zanahorias y luego córtalas por la mitad y haz bastones. Distribúyela sobre una fuente para el horno, añade una cebolla, rocía con aceite de oliva virgen y sal. Cocina al horno precalentado a 180º durante 40 minutos, girando los bastones de zanahoria para que se asen de forma pareja. A media cocción añade perejil picado u otra hierba aromática como orégano, ajedrea, etc. Pruébalo con las zanahorias de esta semana, que nos llegan de la huerta segoviana y son de agricultura tradicional.
Fresón: Esta semana tenemos de nuevo fresones de Huelva, de agricultura tradicional, dulces y sabrosos. Una idea para hacer un postre sencillo pero que suena sofisticado. Necesitarás pimienta rosa en grano. Macera los fresones en vinagre con una cucharada de azúcar durante un par de horas y sírvelos con granos de pimienta rosa. Un sabor delicioso y muy especial.
Kiwis: Kiwis verdes de agricultura tradicional. El kiwi es el fruto de una planta trepadora, no de un árbol. No sólo es una fruta deliciosa, además es súper saludable: contiene el doble de vitamina C que una naranja así como fibra y magnesio que aceleran el tránsito intestinal.
Limón: Uno de nuestros vecinos que tiene una huerta de cítricos, nos ha enviado esta semana sus limones de agricultura tradicional. El limón combina muy bien en los salteados de verduras. Prueba con judías y champiñones: hierve las judías dejándoles crujientes; saltea unos champiñones laminados con un diente de ajo, añade ralladura de piel de limón, tomillo y el zumo de un limón y deja cocer unos minutos, añade las judías, salpimienta y sirve.
Mandarina: Las mandarinas nos llegan de la huerta de cítricos de un productor amigo de Castellón. Son de agricultura tradicional, dulces y jugosas. Te recordamos que si quieres disfrutar más, puedes pedir cajas especiales de 3 kg mandarinas junto con tu caja habitual.
Manzana Golden: La manzana Golden es la variedad más popular de manzanas seguramente por su calidad y versatilidad. Las Golden de esta semana son de agricultura tradicional y vuelven a llegarnos de una finca de frutales del pre Pirineo, en una zona de montaña con clima frío. El manzano es un árbol que tiene que estar expuesto a un período de bajas temperaturas durante el invierno para crecer bien y dar buenos frutos.
Naranjas mesa: Naranjas ecológicas muy sabrosas y de tamaño mayor que las de zumo para servir en la mesa. Un postre sencillo: corta las naranjas en rodajas finas, distribúyelas sobre una fuente y ponles miel y canela por encima. Deja reposar unos minutos para que los sabores se mezclen y a disfrutar!
Naranjas zumo: A lo largo de la temporada, que va de octubre a mayo aproximadamente, te ofrecemos naranjas ecológicas para hacer zumo y naranjas de mesa. Puedes pedir cajas de naranjas para zumo junto con tu caja habitual, de 4, 9 o 15 kg. Vale la pena porque una más que saludable costumbre es comenzar el día con un delicioso zumo de naranja recién exprimido. El zumo recién exprimido conserva toda su vitamina C y su dulce sabor intactos. Las naranjas ecológicas de esta semana son de la huerta malagueña.
Pera Conference: La pera conferencia es la más popular de las variedades europeas de pera por su dulce y jugoso sabor. Las nuestras se cultivan mediante agricultura tradicional en la cuenca del Cinca. Si al tocarlas notas que están duras, déjalas fuera de la nevera un par de días. Cuando las presiones con los dedos y sientas que la pulpa tiende a ceder, están listas para ofrecerte todo su sabor. En ensalada también quedan muy buenas, por ejemplo, con lechuga, unos trozos de queso gorgonzola (o cualquier otro queso azul) y nueces.
Plátano: Continuamos semana a semana recibiendo los plátanos ecológicos de la cooperativa canaria que nos suministra esta exquisita fruta. Es una fruta muy consumida por los deportistas ya que contiene potasio que se asimila rápidamente y permite reponer las sales que se pierden al sudar.
Pomelo: Los pomelos ecológicos nos llegan de Málaga, una tierra muy apta para el cultivo de cítricos de calidad. El pomelo no es una fruta muy habitual en nuestra mesa, sin embargo tiene un sabor exquisito en ensaladas, entrantes como los cócteles de gamba y pomelo y por supuesto en los zumos.
Información legal alérgenos: Puede contener trazos de apio, frutos secos, huevo y leche.