Información de los productos del 14 al 18 de noviembre

A continuación te detallamos la información de los productos de  Disfruta & Verdura  que van en nuestras cajas de la semana del 14 al 18 de noviembre:

  • Acelga larga: Continuamos cosechando acelgas largas en la huerta ecológica y las servimos en manojos. Como habitualmente se hacen hervidas, te aconsejamos que las cocines en dos partes: primero las pencas y a media cocción, añade las hojas verdes, porque tardan la mitad de tiempo. Así evitas que queden demasiado cocidas o que las pencas te salgan duras. Cada semana intentamos que en los contenidos de nuestras cajas variadas haya verduras para hervir, hortalizas para ensalada y diferentes tipos de frutas. A lo largo del año cultivamos más de 140 frutas y verduras distintas, con el objetivo de ofrecer una alimentación variada y saludable.
  • Aguacate: Este fruto ecológico es uno de los que reúne la mayor cantidad de proteínas vegetales del reino vegetal, además de ofrecernos el doble de potasio que un plátano así como una gran cantidad de vitaminas beneficiosas para nuestro organismo. Puedes utilizar el aguacate como un sustituto saludable de la mantequilla a la hora de hacer bocadillos o preparar un sencillo guacamole con tomate cortado en daditos, cebolla picada muy fina, cilantro y unas gotas de zumo de limón.
  • Ajo: Cuando hablamos de las propiedades del ajo, en este caso de agricultura tradicional, nos referimos a su función, es decir, además de sus cualidades nutricionales, de la capacidad de cumplir una función específica como puede ser el mejorar la salud y reducir el riesgo de contraer enfermedades. Una capacidad que tienen muchos productos de la huerta y que ya conocían los médicos en el pasado, que recurría a los vegetales para tratar problemas de salud. Los monjes medievales situaban las salas de curación y convalecencia junto al huerto del convento. En este sentido, el ajo ha ocupado tradicionalmente un papel relevante. Es un gran aliado del aparato digestivo y tiene grandes propiedades curativas conocidas desde la antigüedad y validadas hoy por la investigación científica.
  • Berenjena: Estas hortalizas ecológicas son grandes aliadas de las dietas para perder peso. Las berenjenas tienen pocas calorías y dan sensación de saciedad. Las puedes preparar de mil  maneras. Aquí te proponemos dos: cortadas en rodajas de 1 cm de espesor, asadas a la plancha y servidas con unas gotas de aceite de oliva virgen. Y si no las quieres consumir de inmediato, las puedes cortar en rodajas no muy gruesas, hervir en un litro de vinagre blanco durante unos minutos y escurrir reservando el vinagre. Las dejas  enfriar, las pones en un bote de vidrio, con unos granos de pimienta, perejil, albahaca y una guindilla. Las cubres con el vinagre ya frío y por encima un poco de aceite de oliva. Así se conservarán varios días.
  • Boniato naranja: El boniato naranja cultivado por nuestro amigo José, de Málaga, gran especialista en producción ecológica, es dulce y exquisito. Asado al horno o a la brasa, hervido o frito te ofrece una infinidad de posibilidades como acompañamiento o postre.
  • Brocoli: Esta semana empezamos a recoger el brocoli sembrado en la huerta ecológica hace unas semanas. Esta deliciosa verdura tiene un gran valor nutritivo por sus vitaminas y minerales. Si lo cueces al vapor o lo salteas ligeramente, sus propiedades se conservarán mejor.
  • Caqui: También conocido como palosanto, el caqui de esta semana es de la variedad Persimon. Aunque al tacto los notes duros, están listos para consumir. Esta variedad de agricultura tradicional  tiene una consistencia firme similar a la del melocotón, con exquisito sabor dulce.
  • Calabacín: Con un rallador o un pelador puedes convertir a este calabacín ecológico en unos exquisitos spaghettis vegetales. Luego los salteas o los hierves unos minutos y los aliñas con una salsa ligera que deje apreciar su delicado sabor. Te recordamos como siempre que primero hay que lavarlos. En los sembrados del huerto ecológico, las hortalizas acumulan polvo y tierra por eso hay que lavarlas antes de consumirlas.
  • Calabaza: La calabaza ecológica cultivada en nuestra huerta no es de gran tamaño pero sí de gran sabor. Desde un punto de vista nutricional, es una hortaliza muy adecuada para los niños. Su color es bonito y agradable. Suave y dulce, se puede combinar con legumbres y otras verduras para hacerlas más atractivas. Así, los pequeños se van acostumbrando poco a poco, a una alimentación más sana.
  • Castañas: Una de las principales zonas de producción de castañas se encuentra en los bosques de Asturias y Galicia. Esta fruta de agricultura tradicional se consume en toda Europa  en torno a estas fechas, para la festividad del primero de noviembre. Pelar las castañas suele ser laborioso, así que habitualmente se les hace un corte y se escaldan en agua hirviendo, o se dejan unos minutos en el microondas o también se asan al horno para facilitar la operación. Conviene pelarlas en caliente. En recetas dulces o saladas, son deliciosas y muy poco calóricas. Una idea: haz una crema de castañas asando castañas y chirivías al horno y salteando puerro, cebolla y ajo.  Añade las chirivías y las castañas al salteado, cubre con caldo de verdura y cuece durante 20 minutos. Sala y bate hasta conseguir una crema.
  • Cebolla: la cebolla de la variedad Recas es la que tiene mayor difusión, la que asociamos habitualmente al término cebolla. Su forma y el color dorado cobrizo de su piel la hace inconfundible. Una vez cosechadas, nuestras cebollas ecológicas se almacenan en una zona bien ventilada, al resguardo de la luz y la humedad y se dejan secar unas semanas antes de servirlas.
  • Cebolla morada: Cebolla de cultivo ecológico, de forma ligeramente achatada, con las capas exteriores moradas y el interior con una tonalidad más pálida. En algunas zonas del país se la denomina también cebolla de Figueras, porque en esta zona fronteriza con Francia hay amplias extensiones dedicadas al cultivo de esta variedad.  Es una cebolla que se utiliza mucho en las ensaladas por su textura blanda, carne dulce y sabor agradable. Si la cortas y la dejas unos minutos en remojo en vinagre conseguirás un sabor aún más suave.
  • Col Kale: ¿por qué se ha hecho tan famosa la col Kale? Es una variedad recuperada que cultivamos en nuestra huerta ecológica, similar a la berza. Últimamente se ha puesto de moda entre las estrellas de Hollywood. Gwyneth Paltrow la recomienda fervientemente. Kevin Bacon llegó a decir: “un día sin Kale es como un día sin sol”. Su bajo contenido en calorías la hace muy adecuada en dietas de adelgazamiento, pero sus propiedades nutricionales la convierten en uno de los alimentos más poderosas del planeta. Una sola taza de col Kale contiene 6 gramos de carbohidratos totales (incluyendo 2 de fibra), 3 gramos de proteína y sólo 33 calorías y la grasa vegetal presente en esta “super col” es el ácido graso omega-3 también llamado «ácido alfa-linolénico». Al ser muy baja en calorías, es uno de los alimentos con mayor densidad de nutrientes que existen. Comer Kale a menudo es una gran manera de aumentar el contenido total de nutrientes en nuestra dieta. Una fama bien ganada.
  • Col picuda: Se reconoce por su forma característica acabada, en “pico”, también se la conoce como “corazón de buey”. La cultivamos en nuestra huerta ecológica para cosecharla en otoño e invierno que es cuando están en su mejor momento.  Tiene un sabor más delicado que la col habitual y se puede hacer en ensaladas. Por ejemplo, cortada en juliana y aliñada con aceite, vinagre (poco), sal, pimentón, comino y ralladura de piel de naranja. Una receta antigua y sabrosa.
  • Granada: Si os fijáis en la parte inferior del escudo de España, veréis una granada abierta. Es el único escudo del mundo que tiene esta fruta en sus campos heráldicos. Es que la granada es una fruta única y nuestro país es uno de los principales productores del mundo. Es un cultivo ecológico de nuestro productor amigo José Antonio de Alicante. Tal vez desgranarla resulte algo laborioso pero el premio es dulce y exquisito.
  • Guindillas: Las guindillas de nuestra huerta ecológica pican pero no en exceso. Existe una escala para medir el nivel de picante de las guindillas, que mide el nivel de capsaicina –el ingrediente químico que las hace picantes- mediante una cromatografía. Las nuestras se sitúan en la parte baja de la tabla, pero ojo: también pican.
  • Judía Perona: El nombre “perona” de esta variedad procedente de América tiene un origen curioso. En los años ’40 del pasado siglo, en tiempos de la posguerra española, el país sufría una importante escasez de alimentos. La Argentina estableció unos vínculos comerciales que incluían el suministro de trigo, carne y semillas –entre ellas de judías- que permitieron aliviar la situación. El acuerdo se refrendó con una visita de la primera dama, la mítica Evita Perón, que fue muy aclamada por el pueblo al verla como un símbolo del final de la escasez. Así, la cultura popular comenzó a llamar “perona” a esta judía plana, muy rica y alimenticia, como tributo a Evita Perón. Afortunadamente esos tiempos son historia y hoy podemos disfrutar de esta sabrosa judía ecológica en cualquier receta que nos dicte nuestra imaginación culinaria.
  • Lechuga Maravilla: Esta lechuga seguramente recibió su nombre por su excelente rendimiento y capacidad de adaptación durante las cuatro estaciones. La Maravilla se siembra durante todo el año en nuestra huerta ecológica. Tiene hojas amplias y crujientes, de colores que van del verde al rojizo, y son dulces, sabrosas y muy nutritivas. Las podemos consumir no sólo en ensaladas, también en sopas y cremas, un uso menos habitual pero muy interesante.
  • Lechuga Hoja de Roble roja: La Hoja de Roble ofrece dos variedades de lechuga: la roja y la verde. La roja tiene las hojas un poco más irregulares que la verde, y ambas son dulces y sabrosas, ligeramente crujientes. Se trata de una lechuga ecológica delicada, que una vez cosechada aguanta poco tiempo y conviene conservarla en la nevera. Un truco para que las hojas recobren su aspecto fresco es sumergirlas por un instante en agua caliente y luego aclararlas con agua fría (nos lo enseñó un fotógrafo especialista en alimentos).
  • Lentejas: Son de la variedad Pardina, ecológicas. Una curiosidad: el término lente deriva del latín lens, lenteja; los romanos llamaron así a los cristales biconvexos porque recuerdan a la forma de una lenteja.
  • Mandarina: Las primeras de la temporada de los frutales de nuestro huerto ecológico. Verás que la piel de estas mandarinas tiene tonos verdes, pero por dentro están maduras, jugosas y listas para disfrutar de su sabor.
  • Mango: Producción ecológica que realiza para nosotros un agricultor amigo de la Axarquía. Esta comarca malagueña ubicada junto a la costa granadina, se distingue por la calidad de sus productos agrícolas. La zona tiene un micro clima ideal para las frutas llamadas “tropicales” como el mango, la chirimoya y el aguacate.
  • Manzana Fuji: Esta variedad se creó a principios del pasado siglo en Japón y se bautizó con el nombre del mítico volcán de ese país, el monte Fuji. Son manzanas ecológicas, dulces, jugosas y crujientes. Como recordábamos la pasada semana, la manzana es la fruta mitológica por excelencia. Desde Adán y Eva, pasando por la Ilíada, Newton, Guillermo Tell o Blancanieves aparece en los relatos que pueblan el imaginario colectivo. Y también en la marca de ordenadores y teléfonos más valorada del mundo. Hay casi mil variedades diferentes de manzanas en el mundo. La Fuji se sitúa entre las más apreciadas por su sabor.
  • Naranjas: Nuestras naranjas ecológicas para zumo llegan ahora de los campos de Málaga, donde se hacen las primeras cosechas. A medida que el otoño avanza la recolección de naranjas ecológicas se va desplazando al norte hasta alcanzar el Levante, donde la naranja es la reina indiscutida.
  • Ñora: Este pequeño pimiento redondo, secado al sol, es de agricultura tradicional y nos llega de Murcia. Se utiliza para elaborar pimentón y en el Levante, para dar sabor a los arroces y paellas. La mejor forma de aprovechar su pulpa es hervirlo unos minutos, retirar la carne con un cuchillo y añadirla a los sofritos.
  • Patata Agria: Esta patata ecológica pertenece a la variedad aconsejada para freír. Disponer de patatas agrias para freír es condición indispensable pero no suficiente para lograr una patata frita excelente. Según los especialistas se debe recurrir a la técnica de la doble fritura. Primero se fríen 3con el aceite a temperatura más baja durante unos 5 minutos, se dejan enfriar y luego, en el momento de servir se las vuelve a pasar dos minutos por el aceite, está vez a temperatura más alta, para que queden crujientes por fuera y cremosas por dentro.
  • Patata Monalisa: Esta variedad con nombre de obra maestra de la pintura renacentista es una de las más populares por su versatilidad. Son de agricultura tradicional y sirven tanto para freír como para cocer a asar al horno.
  • Pera Conference: Esta variedad nació en Inglaterra el siglo XIX y se presentó oficialmente en la Conferencia Nacional de Peras Británicas de 1895, de ahí el nombre “Conference” o “Conferencia”.  En poco tiempo, conquistó Europa por su dulzura y jugosidad y porque se conservan muy bien. Pronto se convirtieron en la variedad de peras más consumida en todo el continente. Las nuestras, cultivadas mediante agricultura tradicional en la cuenca del Cinca,  se recogen a  lo largo del otoño, comenzando en septiembre.
  • Pimientos italianos amarillos: Estos pimientos ecológicos, aunque se llamen así, no llegan de Italia. Se trata de una variedad que hemos recuperado en nuestra huerta. Tienen un color amarillo delicado, son ideales para el sofrito y también para freír y servir como acompañamiento, ya que su piel es suave y su sabor ligeramente dulce.
  • Pimiento Lamuyo: El clásico pimiento rojo, de forma rectangular, carnoso y de agriculura tradicional. Si quieres tener un aperitivo siempre listo los puedes asar al horno, pelar, cortar en tiras y poner en un recipiente cubiertos con aceite de oliva y un diente de ajo picado para darle más sabor.
  • Pimientos mini de colores: Desde hace un par de años introducimos su cultivo en nuestro huerto ecológico. Amarillos, naranjas, rojos, verdes… Su tamaño pequeño y su alegre colorido los hacen muy atractivos a la vista a la hora de servirlos. Y al probarlos descubrimos que también son carnosos y muy sabrosos. Ya sea crudos en ensalada, asados al horno o fritos y aliñados con unas escamas de sal, son exquisitos.
  • Plátano: Nuestros plátanos ecológicos llegan a la Península provenientes de una cooperativa productora de un valle de la isla de La Palma, una de las mejores zonas plataneras de Canarias.
  • Pochas: Hemos comenzado recientemente a cosechar este tipo de alubias en nuestra huerta ecológica. La característica que diferencia a las pochas de las alubias es que son recolectadas antes de su maduración, cuando aún conservan toda su ternura. Precisamente su nombre viene de su color pálido y su aspecto “pocho”. Las recibirás en su vaina y al desgranarlas y cocerlas verás que la legumbre fresca se diferencia de la seca por un sabor más fino y por tener menos piel.
  • Remolacha: Su característico color rojo se debe a su alto contenido en hierro y antioxidantes que, como sabes y no nos cansamos de repetir, son muy beneficiosos para prevenir enfermedades. Esta remolacha exquisita es de nuestra huerta ecológica. Puedes hacerla en ensalada hervida con patatas y aliñada con cebolla, pepinillos y una salsa de yogur mezclado con mostaza.
  • Tomate de colgar: Este delicioso tomate de origen mallorquín, crece en racimos que una vez cosechados se cuelgan en sitios frescos y bien aireados para conservarlos durante más tiempo. De agricultura tradicional,  forma redondeada, piel fina y color rojo anaranjado, son exquisitos en ensalada o para restregar sobre el pan.
  • Tomates maduro en rama: Especial para preparar sofritos aunque la calidad y el sabor de estos tomates ecológicos los hacen aptos también para ensaladas. Su colorido rojo intenso y las ramas verdes que lo acompañan nos recuerdan a las imágenes más bonitas de la huerta.
  • Tomate verde: Es una variedad especial para ensalada, crujiente y ligeramente dulce. Su tono verde se debe a que el momento óptimo para cosecharlos es justo antes de que enrojezcan.  Si los dejamos unos días fuera de la nevera poco a poco adquirirán un colorido rojo.
  • Uva blanca: Esta uva ecológica, dulce y jugosa, la ha cosechado para nosotros José Antonio, un productor amigo de Novelda, Alicante. En esta zona se cultiva uva de mesa hasta finales de año. De hecho, aquí se cosecha la mayor parte de las uvas que se toman con las doce campanadas. La uva de mesa es un postre habitual pero también la puedes utilizar como acompañamiento de carnes, especialmente en guisados de cerdo, partiéndola por la mitad y añadiéndola al final de la cocción, justo al apagar el fuego.
  • Verduras para el caldo: ¡Y por fin llegó el frío! Ese tiempo en que un exquisito caldo casero nos pone a tono. Aquí tienes nabo, chirivía, apio, col, puerro y zanahoria de agricultura tradicional para que las sopas sepan como las de antes. Y si quieres, como alternativa al caldo, puedes hacer una sopa de verduras cortando en dados y en juliana todas las hortalizas, sofreírlas un poco, añadir pimentón, cubrirlas con agua y dejar a fuego lento hasta que estén hechas. Queda buenísimo.
  • Zanahorias: Crudas o cocidas mantienen sus proverbiales propiedades saludables, sobre todo el beta caroteno esencial para la producción de vitamina A. Son de agricultura tradicional y una breve cocción no afecta al betacaroteno, es más ayuda a hacerlo más asimilable, y si lo aliñamos con aceite de oliva, aún mejor.