Información de los productos del 26 al 30 de diciembre

A continuación te detallamos la información de los productos de  Disfruta & Verdura  que van en nuestras cajas de la semana del 26 al 30 de Diciembre:

  • Acelga larga: Cosechamos la acelga larga, de penca blanca, en nuestra huerta ecológica. Esta semana hemos compartido una quiche de acelga hecha con pasas, piñones, huevo, nata y queso rallado. Buenísima! Una deliciosa manera de disfrutar de los beneficios de la acelga para nuestro organismo: vitaminas A, C y K, ácido fólico que ayuda a metabolizar el hierro y sales  minerales, como el calcio, magnesio y potasio. Además de la fibra que favorece la actividad digestiva.
  • Aguacate: Producto ecológico de la Costa Tropical, la franja costera situada entre Málaga y Granada, que tiene un microclima muy adecuado para el cultivo de estos frutos. Las principales propiedades benéficas del aguacate se deben a su contenido de ácido graso linoléico y omega 3, las llamadas grasas buenas que inhiben la producción de colesterol. A esto se suman los antioxidantes que frenan los radicales libres y las vitaminas A, D y E. Un alimento sabroso y saludable que en estas fiestas te servirá para dar una textura diferente a tus ensaladas.
  • Ajo: Según un estudio científico, la mejor manera de eliminar el olor que nos queda tras comer ajo es consumir en la misma comida una manzana. Esto se debe a que los polifenoles aceleran la rotura de los compuestos sulfurosos responsables del típico olor a ajo. Este ajo de agricultura tradicional te dará muchas satisfacciones en la cocina. Prueba los spaghettis al ajo, aceite y guindilla: en una sartén grande, sofríe dos dientes de ajo laminados con una guindilla picada, baja un poco el fuego, añade una cucharada de agua de cocción de la pasta para darle cremosidad, echa los spaghettis al dente para acabarlos en la sartén revolviendo durante medio minuto. Perejil picado, un poco de parmesano rallado y listo. ¡Así de fácil!
  • Alcachofa: La alcachofa, además de ser una de las más sabrosas delicias de nuestra ecológica es un buen amigo del hígado y contribuye a desintoxicarlo. Gracias a los ácidos fenólicos, protege al hígado de los radicales libres mientras la cinarina estimula la regeneración de las células hepáticas dañadas por sustancias tóxicas
  • En los últimos años hemos sembrado diversas parcelas con alcachofas, ya que es uno de los cultivos que mejor se da en nuestra huerta ecológica y queremos ofrecer durante toda la temporada este sabroso y saludable producto.
  • Berenjena: Estas hortalizas ecológicas son grandes aliadas de las dietas para perder peso. Las berenjenas tienen pocas calorías y dan sensación de saciedad. Las puedes preparar de mil maneras. Aquí te proponemos dos: cortadas en rodajas de 1 cm de espesor, asadas a la plancha y servidas con unas gotas de aceite de oliva virgen. Y si no las quieres consumir de inmediato, las puedes cortar en rodajas no muy gruesas, hervir en un litro de vinagre blanco durante unos minutos y escurrir reservando el vinagre. Las dejas  enfriar, las pones en un bote de vidrio, con unos granos de pimienta, perejil, albahaca y una guindilla. Las cubres con el vinagre ya frío y por encima un poco de aceite de oliva. Así se conservarán varios días.
  • Boniato naranja: El boniato naranja de esta semana nos llega de la huerta ecológica malagueña. Es un alimento de bajo contenido graso y que cuenta con una alta cantidad de vitamina E, además, contiene más vitaminas que las patatas y combina los valiosos antioxidantes con los minerales. En este sentido, dentro de las principales propiedades del boniato, encontramos que, gracias a su rico contenido en antioxidantes ayuda a reducir el riesgo de sufrir enfermedades.
  • Brócoli: Cosechamos el brócoli verde de esta semana en nuestra huerta ecológica. Los Romanos de la antigüedad tenían la costumbre de comer brócoli crudo antes de las comidas para que el organismo absorbiese mejor el vino que bebían en los banquetes. Esta hortaliza tiene vitaminas y minerales muy saludables, que se conservarán mejor si lo consumes hecho al vapor, salteado o ligeramente hervido.
  • Calabacín: Pocas calorías, mucha fibra, vitaminas y mucho sabor. Si nos fijamos, el calabacín es extraordinario, en especial cuando es ecológico. Córtalo en sentido longitudinal, en láminas finas, pon sal, unas gotas de aceite de oliva y cubre con pan rallado; 15 minutos de horno precalentado a 180º  y tendrás un acompañamiento ligero y sabroso.
  • Calabaza: La calabaza ecológica cultivada en nuestra huerta no es de gran tamaño pero sí de gran sabor. Desde un punto de vista nutricional, es una hortaliza muy adecuada para los niños. Su color es bonito y agradable. Suave y dulce, se puede combinar con legumbres y otras verduras para hacerlas más atractivas. Así, los pequeños se van acostumbrando poco a poco, a una alimentación más sana.
  • Cebolla: La cebolla de la variedad Recas es la que tiene mayor difusión, la que asociamos habitualmente al término cebolla. Su forma y el color dorado cobrizo de su piel la hace inconfundible. Una vez cosechadas, nuestras cebollas ecológicas se almacenan en una zona bien ventilada, al resguardo de la luz y la humedad y se dejan secar unas semanas antes de servirlas.
  • Cebolla guarnición: En época navideña, solemos proponer esta variedad conocida también como cebollita francesa, de agricultura tradicional presente en las celebraciones de estas fechas. Son excelente acompañamiento de los asados y glaseadas quedan exquisitas. Para glasearlas solo tienes que pelar las cebollitas son cortar los extremos para que no se suelten las capas y las ponemos en una cazuela con 100 g de mantequilla, 50 g de azúcar y ½ litro de agua. Las cocemos a fuego lento hasta que el agua se evapore.
  • Cebolla morada: Nos llega de la huerta ecológica zaragozana. Tiene forma ligeramente achatada, con las capas exteriores moradas y el interior con una tonalidad más pálida. Es una cebolla que se utiliza mucho en las ensaladas por su textura blanda, carne dulce y sabor agradable. Si la cortas y la dejas unos minutos en remojo en vinagre conseguirás un sabor aún más suave.
  • Coliflor: La coliflor blanca de esta semana se ha cosechado en la huerta ecológica.  A pesar de tener grandes fans por su excelente sabor, la coliflor tiene también detractores sobre todo por el olor que desprende a la hora de hervirla. Aquí tienes algunos trucos para evitar o por lo menos reducir el olor y disfrutar más de su sabor: echa un chorro de leche cuando rompa el hervor, o añade al agua unas semillas de comino, que además le darán un ligero sabor. Otro consejo: para conservar mejor todas sus propiedades hierve las flores con poco agua o cuécelas al vapor.
  • Col Kale: ¿por qué se ha hecho tan famosa la col Kale? Es una variedad recuperada que cultivamos en nuestra huerta ecológica, similar a la berza. Últimamente se ha puesto de moda entre las estrellas de Hollywood. Gwyneth Paltrow la recomienda fervientemente. Kevin Bacon llegó a decir: “un día sin Kale es como un día sin sol”. Su bajo contenido en calorías la hace muy adecuada en dietas de adelgazamiento, pero sus propiedades nutricionales la convierten en uno de los alimentos más poderosas del planeta. Una sola taza de col Kale contiene 6 gramos de carbohidratos totales (incluyendo 2 de fibra), 3 gramos de proteína y sólo 33 calorías y la grasa vegetal presente en esta “super col” es el ácido graso omega-3 también llamado «ácido alfa-linolénico». Al ser muy baja en calorías, es uno de los alimentos con mayor densidad de nutrientes que existen. Comer Kale a menudo es una gran manera de aumentar el contenido total de nutrientes en nuestra dieta. Una fama bien ganada.
  • Col Picuda: Esta variedad tiene una forma característica acabada en “pico” y un sabor delicado y muy agradable. Fue uno de los primeros cultivos que sembramos en nuestro huerto ecológico. Y cada año comprobamos su éxito entre todos los “disfrutistas”, los que formáis parte de la comunidad de Disfruta & Verdura que cada vez pedís más col picuda a la hora de hacer cambios en las cajas.
  • Col Romanesco: Es “prima” de la coliflor, tiene un bonito color verde lima y unas atractivas flores en forma de arbolitos o de pagoda. La hemos cosechado en nuestra huerta ecológica. Su nombre “Romanesco” es de origen italiano ya que esta variedad se comenzó a cultivar en ese país. Se hierve igual que la coliflor y su sabor es más suave y dulce.
  • Endibia roja: El año pasado comenzamos a plantar en la huerta ecológica esta variedad de endibia, que algunos llaman radicchio  utilizando su nombre italiano. Nos gusta la forma elegante, el color, la textura ligeramente crujiente y sobre todo el sabor exquisito, entre dulce y amargo. Las ensaladas de endibia roja quedan muy buenas, y en la cocina italiana se utiliza en los risottos y para condimentar algunas pastas (por ejemplo, cortada en juliana, salteada y mezclada con queso gorgonzola).
  • Escarola rizada: Las plantas de esta exquisita variedad de nuestra huerta ecológica se atan con esparto de manera que las hojas centrales, al no recibir luz solar, se blanquean, pierden su sabor amargo original y quedan dulces y tiernas. Las hojas exteriores más verdes se consumen también, sobre todo las más tiernas. Prueba una original tortilla cortando en juliana y salteando las hojas que descartes al hacer una ensalada. Luego haz la tortilla como siempre, salpimentando. Tiene un ligero sabor amargo y delicioso a la vez.
  • Espinacas Baby: Pequeñas, delicadas y exquisitas, estas espinacas son nuestras favoritas. Se trata de las espinacas de hoja lisa cosechada en forma temprana, de agricultura tradicional, para aprovechar toda su ternura. Son ideales en ensalada, hervidas o salteadas. No hace falta quitarles el tallo, son igual de tiernos que las hojas. Si las vas hervir o saltear, la cocción debe ser corta, un par o tres minutos es suficiente.
  • Garbanzos: Un productor amigo de León nos envía estos garbanzos ecológicos buenísimos para todo, incluso para contar los puntos al mus. Antes de cocerlos debes dejarlos en remojo cubiertos de agua durante 12 horas y mucha gente les añade una cucharadita de bicarbonato para que queden más tiernos.
  • Granada: Esta fruta ecológica da mucho juego en ensaladas y postres y es una de las mejores fuentes de antioxidantes naturales, es decir de los elementos que ayudan a frenar la acción de los radicales libres y así retrasar el envejecimiento y prevenir enfermedades. Un zumo de granada –pasando los granos por la batidora y colando- es un delicioso concentrado de salud.
  • Hierbas aromáticas: En el huerto ecológico reservamos un rincón para las plantas aromáticas que dan sabor a nuestra cocina mediterránea. Plantamos perejil, romero, tomillo, salvia, orégano, menta, etc.
  • Hinojo: Hasta hace poco, esta hortaliza no se consumía mucho en nuestro país. Pero su sabor suave y dulce, ligeramente anisado y su textura crujiente están logrando que el hinojo gane una gran cantidad de adeptos, que aprecian los sabores de la buena cocina. Lo hemos cosechado en la huerta ecológica y para limpiar el bulbo, tienes que quitar las hojas exteriores más duras, que puedes reservar para el caldo, mientras que el tallo, en especial las pequeñas hojas verdes, se suelen utilizar para aromatizar pescado al horno. Te proponemos una idea para ensalada: corta el hinojo en rodajas finas y naranja en dados (quitando todo lo blanco), añade aceitunas negras y alcaparras y aliña con aceite de oliva virgen y sal.
  • Judía Perona: Esta semana hemos pedido a un vecino del huerto, que también se dedica al cultivo ecológico, que nos suministrase judías de esta sabrosa variedad. Revisando nuestro recetario hemos encontrado esta curiosa idea de judías verdes al vapor con almendras. Cuece las judías al vapor durante 10 minutos, retíralas, sumérgelas en agua fría y escurre. Saltea una cebolla picada en aceite durante 3 minutos, añade las judías, el zumo de ½ limón, 2 puñados de almendras peladas y tostadas, un poco de ralladura de piel de limón y un poco de romero. Revuelve durante unos segundos para que todo se caliente y los sabores se amalgamen y a disfrutar.
  • Kiwi: Según los expertos el consumo de uno o dos kiwis verdes al día, tomados con el desayuno, ayuda a prevenir el estreñimiento. Y si son ecológicos, como los nuestros, aún mejor. El kiwi toma su nombre del simpático pajarillo de pico largo y sin alas, que es el símbolo nacional de Nueva Zelanda. Este país fue el primer productor del mundo en el siglo XX y contribuyó a su difusión. De hecho, a los neozelandeses se les conoce popularmente cono “kiwis”. Hoy el esta fruta deliciosa se cultiva también en nuestro país.
  • Kiwi amarillo: Más allá de la lógica diferencia en el color de su pulpa, el kiwi amarillo se diferencia de su hermano verde por tener una forma algo más alargada, con un extremo superior en forma de corona. Además, su piel suele tener un tono marrón algo más claro y también más liso que la del kiwi verde. Es de agricultura tradicional y su pulpa es dorada con pequeñas semillas de color rojo o negro. Además, su sabor también difiere del de su hermano mayor ya que, al contrario que este, el kiwi amarillo es más dulce y tropical.
  • Lechuga Hoja de Roble roja: La Hoja de Roble ofrece dos variedades de lechuga: la roja y la verde. La roja tiene las hojas un poco más irregulares que la verde, y ambas son dulces y sabrosas, ligeramente crujientes. Se trata de una lechuga ecológica delicada, que una vez cosechada aguanta poco tiempo y conviene conservarla en la nevera. Un truco para que las hojas recobren su aspecto fresco es sumergirlas por un instante en agua caliente y luego aclararlas con agua fría (nos lo enseñó un fotógrafo especialista en alimentos).
  • Limón: El limón ecológico es un exquisito condimento en la cocina, que permite preparar una infinidad de recetas al horno o sustituir al vinagre en los aliños de ensaladas. El color amarillo dorado del limón que nos recuerda al sol, hace que en muchas culturas esta fruta haya tenido un carácter sagrado.
  • Mandarina: Nuestras mandarinas ecológicas te llegarán con hojas verdes frescas, la mejor manera de comprobar que están recién cosechadas y no han pasado por tratamientos. Disfruta de su jugoso sabor dulce.
  • Mango: Volvemos a incluir mangos de la Costa Tropical, la comarca donde el cultivo tradicional de esta fruta extraordinariamente dulce y jugosa está muy extendido.
  • Manzanas Golden y Fuji: Ambas variedades de manzana son de la huerta ecológica de la cuenca del Jalón, el río que atraviesa Soria y Aragón para desembocar en el Ebro. La manzana Golden tiene un  color dorado de su piel y la Fuji tonos rojos intensos, sobre todo en la parte donde ha recibido más  insolación. Tienen en común la dulzura y se diferencian por la consistencia de su carne, siendo la Fuji más crujiente.
  • Naranjas zumo: Un zumo al día da fuerza, salud y alegría, reza el dicho popular. Lo cierto es que la vitamina C de una naranja ecológica recién exprimida es un gran aliado de la salud para prevenir resfriados y aumentar los antioxidantes.
  • Ñora: Este pequeño pimiento redondo, secado al sol, es de agricultura tradicional y nos llega de Murcia. Se utiliza para elaborar pimentón y en el Levante, para dar sabor a los arroces y paellas. La mejor forma de aprovechar su pulpa es hervirlo unos minutos, retirar la carne con un cuchillo y añadirla a los sofritos.
  • Patata Agria: Esta variedad de agricultura tradicional es la más adecuada para freír. Disponer de patatas agrias para freír es condición indispensable pero no suficiente para lograr una patata frita excelente. Según los especialistas se debe recurrir a la técnica de la doble fritura. Primero se fríen con el aceite a temperatura más baja durante unos 5 minutos, se dejan enfriar y luego, en el momento de servir se las vuelve a pasar dos minutos por el aceite, está vez a temperatura más alta, para que queden crujientes por fuera y cremosas por dentro. Si quieres conseguir patatas fritas sin freírlas prueba con el horno: corta estas patatas de agricultura tradicional en bastones como para freír, las sumerges 10 minutos en agua para que suelten el almidón, las retiras y secas bien con un paño, luego las pones en la bandeja del horno untadas con aceite de oliva; asas durante 25 minutos al horno precalentado a 200º y cuando estén tiernas subes la temperatura a 250º durante 5 minutos más hasta que están doradas y crujientes.
  • Patata guarnición: De tamaño pequeño, pensadas para acompañar los platos de las celebraciones que se avecinan. Son de agricultura tradicional, piel suave y carne fina y poco harinosa. Se cuecen sin pelar para evitar que se deshagan, sobre todo si se van a hervir. Por tamaño y textura, son ideales para caramelizar, por ejemplo, con azúcar moreno y vino tinto.
  • Patata Monalisa: Tiene nombre de obra maestra de la pintura renacentista y es una de las variedades de patata más populares por su versatilidad, ya que se puede utilizar en todo tipo de cocciones. Es de agricultura tradicional y, si las vas a hervir, hazlo antes de pelarlas para que se conserven mejor.
  • Pera Conference: Esta variedad nació en Inglaterra el siglo XIX y se presentó oficialmente en la Conferencia Nacional de Peras Británicas de 1895, de ahí el nombre “Conference” o “Conferencia”.  En poco tiempo, conquistó Europa por su dulzura y jugosidad y porque se conservan muy bien. Pronto se convirtieron en la variedad de peras más consumida en todo el continente. Las nuestras, cultivadas mediante agricultura tradicional en la cuenca del Cinca,  se recogen a  lo largo del otoño, comenzando en septiembre.
  • Piña: Fruta tropical por excelencia, su imagen es sinónimo de fiesta: sólo con verla dan ganas de bailar. Por eso en estas fechas incluimos piña ecológica en nuestras cajas de Navidad. Un regalo para el paladar que proporciona una buena cantidad de vitaminas y minerales. Recuerda que combina muy bien con platos salados –cerdo, aves- creando un agradable contraste agridulce.
  • Plátano: Si os fijáis en las retransmisiones de los partidos de tenis, cuando los jugadores se sientan entre un set y otro, muchas veces sacan un plátano y comen un trozo (Rafa Nadal lo hace casi siempre). Un estudio de una universidad americana demostró que comer un trozo de plátano cada 15 minutos durante una competición es igual de eficaz y más saludable que una bebida isotónica para recuperar los elementos que pierde el organismo al realizar esfuerzos intensos y prolongados. Ya lo sabes: cuando hagas deporte, llévate uno de los plátanos ecológicos que recibes en tu caja para recuperarte mejor.
  • Pomelo: El zumo de pomelo tiene la misma cantidad de vitamina C y menos calorías que uno de naranja. Además puedes degustar este pomelo ecológico de muchas maneras diferentes, por ejemplo, cortándolo en gajos y preparando un cóctel de gambas y pomelo.
  • Puerros: Los hemos cosechado en el huerto ecológico y los servimos cortados, con sólo la parte blanca que es lo que se consume habitualmente, y enteros, con la parte verde, que se puede utilizar para caldos y cocidos, en la cocina de aprovechamiento. El sofrito de puerro es la base tradicional del risotto. Con un puerro, unas cuantas cucharadas de caldo de cocido y parmesano rallado, puedes hacer un risotto antológico.
  • Remolacha: Las remolachas ecológicas son ricas y muy saludables, además se conservan hasta dos semanas en la nevera. Aquí va una idea para una ensalada con aires alemanes: patatas y remolachas hervidas, una cebolleta picada fina, pepinillos en vinagre y un aliño de yogur batido con mostaza.
  • Tomates maduro en rama: Especial para preparar sofritos aunque la calidad y el sabor de estos tomates ecológicos los hacen aptos también para ensaladas. Su colorido rojo intenso y las ramas verdes que lo acompañan nos recuerdan a las imágenes más bonitas de la huerta.
  • Tomate ensalada: Esta  variedad especial para ensalada es de producción ecológica. Tiene una textura crujiente y un sabor ligeramente dulce. A veces tienen un colorido verde, porque se cosechan en el momento óptimo justo antes de que enrojezcan. Ese color no significa que aún no estén maduros, están listos para consumirlos y disfrutar de su textura crujiente y su sabor intenso.
  • Tomate de colgar: Este delicioso tomate de origen mallorquín, crece en racimos que una vez cosechados se cuelgan en sitios frescos y bien aireados para conservarlos durante más tiempo. De agricultura tradicional,  forma redondeada, piel fina y color rojo anaranjado, son exquisitos en ensalada o para restregar sobre el pan.
  • Verduras para el caldo: De la huerta ecológica directas a la olla para prepares un gran caldo casero: nabo, chirivía, apio, col, puerro y zanahoria. Puedes hacer una sopa de verduras o un minestrone, añadiendo beicon en dados y alubias
  • Zanahorias: Crudas o cocidas mantienen sus proverbiales propiedades saludables, sobre todo el betacaroteno esencial para la producción de vitamina A. Nuestras zanahorias son ecológicas y puedes servirlas tanto en crudo como cocidas brevemente para hacer más asimilable el betacaroteno.