Estos días de vuelta a la normalidad (o vuelta al cole, para los peques) no siempre son fáciles. Pero una buena alimentación, equilibrada y saludable, te puede ayudar. Algunos consejos: comer mucha fruta fresca (por sus vitaminas y minerales) y mucha fibra, beber agua a menudo, aún sin sed, y hacer un poco de ejercicio cada día.
1. Desayuna bien.
Levántate con tiempo para preparar y disfrutar de un buen desayuno. Fruta, cereales integrales, yogur… Un desayuno completo te permite empezar el día con energía.
2. Come mucha fruta.
Aporta las vitaminas y minerales necesarios para el metabolismo energético y la transmisión nerviosa. Así podrás concentrarnos más y retener mejor la información.
3. No abuses del café.
Puede provocar alteraciones nerviosas y dificultar el sueño. Y ya sabes: tras una mala noche viene un mal día.
4. Aumenta el consumo de fibra.
Come pan y cereales integrales y al menos 5 raciones de fruta y verdura al día. Con las vacaciones el ritmo intestinal se altera y conviene regularizarlo para evitar molestias.
5. Bebe mucha agua, incluso antes de tener sed.
La deshidratación provoca fatiga, que nos impide rendir en cualquier actividad.
6. Haz un poco de ejercicio cada día.
Caminar, nadar, ir al gimnasio… te ayudará a mantenerte en buen estado y a perder algún kilo de más. Y es un hábito excelente para desconectar del trabajo, combatir el estrés y sentirse mejor.