Inauguramos una sección de pizzas de verduras con esta receta que no lleva queso. En el súper encontrarás bases para pizzas que salen muy bien. La pizza de escarola es muy sencilla su éxito reside en el contraste de sabores: el amargo de la escarola con el dulce de las pasas, el retrogusto de las anchoas con las aceitunas negras. Sabrosísima.
Ingredientes:
- 1 Escarola
- 1 Masa para pizza
- 100 g de Olivas negras de Aragón
- 50 g de Pasas de uva
- 10 g de Piñones
- 12 Alcaparras
- 4 Filetes de anchoa
- 2 Ajos
- Sal y aceite de oliva virgen extra
Preparación:
- Lavamos y troceamos las hojas de escarola. Secamos bien con un paño de cocina.
- En una sartén grande calentamos cuatro cucharadas de aceite de oliva a fuego fuerte. Añadimos la escarola, salteamos un minuto mezclando, bajamos la llama y cocemos unos minutos hasta que quede tierna. Importante: no conviene llenar la sartén con la escarola porque soltaría demasiada agua y se herviría en lugar de saltearse. Mejor saltearla en dos o tres tandas.
- Salamos, retiramos de la sartén y reservamos la escarola salteada en un plato aparte.
- Ponemos las pasas de uva en remojo en agua tibia durante 20 minutos.
- Aplastamos los dos ajos sin pelar y los ponemos en la misma sartén donde hemos hecho la escarola, a fuego medio. Echamos las anchoas y las deshacemos con la ayuda de una cuchara de madera. Añadimos los piñones y las alcaparras y tostamos durante uno o dos minutos, hasta que cojan color. Añadimos las pasas de uva y la escarola, revolviendo durante un minuto para que coja sabor y retiramos del fuego.
- Extendemos la masa de pizza en un molde para pizzas o en la bandeja del horno, la cubrimos con la escarola y las olivas negras y cocemos al horno precalentado a 200º durante el tiempo indicado en el paquete.